En el año 1975 se establece un acuerdo entre PADELAI (Patronato de la Infancia) y el Ministerio de Educación y Justicia para brindar educación a aquellos niños con dificultades de aprendizaje y alteraciones de su conducta, que se encontraran internos en la mencionada institución, a la Escuela se la denomino “Escuela Diferenciada para Irregulares Sociales Nº 14” única en su género dentro del ámbito de la Capital Federal) dependiente en ese entonces de la Dirección Nacional de Educación Especial.
Comenzó a funcionar en marzo del año siguiente en un ex hospital dependiente de PADELAI, sito en Humberto 1º y Balcarce.
El lugar una planta alta de salas amplias y frías, sin patio frías, sin patio exterior lo albergó gracias al aporte del peculio personal de la primera Directo de la Escuela, la Sra. Noemí Flores, quien equipo con artefactos de luz y pintó las aulas.
La primera Vicedirectora fue la Sra. Teresa de Tellarini, algunas de las docentes era: Mabel Ballessio, Alicia Igora, Mirta Co de Pérez, María del Carmen Baldi, Marta Molinari, Elvira Barreiro, etc.
Funcionó en ese predio hasta el año 1979, para luego trasladarse, al Barrio de Barracas a la calle Iriarte, entre Herrera y Montes de Oca, una antigua escuela dependiente del Ministerio de Educación, derruida y en estado de abandono por estar destinada a ser demolida ante la inminente construcción de la autopista.
Ese lugar no era adecuado para los niños, debido a su peligrosidad y escasa funcionalidad. En una misma aula trabajaban dos grupos separados por armarios.
En febrero de 1980 el personal se trasladó a la Escuela de Educación Especial Nº 5, sita en la calle Ferré 1957 del barrio de Pompeya y el mobiliario a Av. Independencia 668, pero el ciclo electivo se inició en la casona de la calle Montevideo al 600 también una antigua construcción sin luz natural y con empinadas escaleras.
Recien en el verano de 1981 se tomó posesión del edificio ubicado en Av. Independencia 668.
<!--[if !vml]--><!--[endif]--> <!--[if !vml]--><!--[endif]--> Nuestra alegría duro poco, un tiempo después se observó que el patio cubierto de la escuela trepidaba con el juego de niños. En la planta baja (que eran las cocheras de la casa) al construirse el edificio de la Escuela de Educación Especial Nº 8, se había quitado una pared portante que ponía en peligro la planta alta.
Una nueva mudanza se hizo necesaria…
Nos trasladamos al edificio que desocupó la Escuela de Educación Especial Nº 29, en la calle Austria, casi Las Heras. Cabe destacar que el traslado se hizo gracias al esfuerzo de Directoras y Docentes.
Este lugar fue uno de los más inadecuados. Las aulas eran boxes son puertas, los armarios cumplían la función de las mismas.
Una parte de la Escuela entraba por Austria y la otra por Agüero, en el ir y venir cruzábamos grandes patios que no podían usarse como tales por pertenecer a otra repartición. Los baños eran compartidos por los integrantes de la Banda Sinfónica de Ciegos.
El comedor escolar funcionó gracias al invalorable aporte de las madres que preparaban los almuerzos diariamente.
A medida que se sucedían estos avatares la población escolar fue cambiando ya no estaban los niños de PADELAI, los alumnos eran derivados por Sanidad Escolar, con la modalidad de leves y la originaria Escuela de Diferenciada para Irregulares Sociales pasó a ser de Educación Especial como otras del Área.
En 1986 volvemos a nuestra querida en Avenida Independencia Nº 668 y seguimos trabajando en ella hasta el día de hoy…
Las aulas son pequeñas y convergen a un patio cubierto, se ha realizado mejoras, tenemos calefacción… si bien el edificio no es el ideal para una institución educativa porque es una antigua casa de familia con grandes superficies vidriadas (cristales, vitreaux) escaleras empinadas y escaso espacio para sanitarios. Nos hemos adaptado a ella.
Podemos alegrarnos hoy, después de mucha lucha, a partir del año 1998 obtuvimos una parcela de terreno contigua al edificio, que nos sirve de patio de <!--[endif]-->recreación y para actividades de Educación Física, también proyectamos en él una huerta. Su posesión se logró el día 3 de septiembre del año 2001.
La población escolar se hizo heterogénea, esta compuesta por niños con distintos grados de dificultades de aprendizaje, con problemas emocionales, sensoriales y dificultades motoras, es decir, somos una escuela integrada.
Sabemos que el nombre Constancio C. Vigil, se eligió, por ser dicho escritor autor del cuento La Hormiguita viajera con quien nos identificamos ampliamente. Debemos hacer referencia al personal Directivo que tuvo a su cargo la conducción del establecimiento desde sus comienzos hasta la fecha y que guió en las diversas situaciones tan comprometidas citadas anteriormente.